lunes, 22 de julio de 2024

Presencia Real.

 

Falacia tras falacia. Cuanto más ahondas en aquello que te rodea más falsedad encuentras, y cuando te das cuenta de que esa mentira, esa tramoya, esa pantomima la proyectas tú en tu interior, supone una devastación plena, un derrumbe de todo lo que pensabas que eras, un desplome de tu distorsionada y falsaria imagen que no era más que un conjunto de píxeles agregados sin contenido que al mínimo tacto se disuelven y disipan.

La farsa la creas tú con tu proyector mental, el escenario en el que te insertas está trucado, tuneado, trampeado por un filtro ya preestablecido de antemano, ya instalado para que lo des una simulación de vida, de movimiento, de corporeidad y te creas la vaina que te hacen creer que tú creas. Un argumento predefinido, un guión diseñado entre bambalinas, tan sibilinamente orquestado que tú tienes la sincera percepción de que estás viviendo tu vida, de que tienes libre elección, pero cuyo desenlace ya está designado previamente. ¿Acaso el entramado no termina envolviéndote en la misma historia de siempre?

Contienes en ti una convergencia de azares, causalidades, sincronicidades, metaprogramas, arquetipos psicóideos, confluencias energéticas y planetarias, en definitiva, un sinfín de intersecciones cruzadas –y revueltas–  de todo tipo, que te hacen identificarte con un personaje pseudoconsciente que no eres tú en absoluto, ya que tú eres un no-ser siendo, un vacío creador al que le han llenado desde afuera de basura mental y emocional ajena para incrustar en tu eje, como un implante divisivo, la corrosiva y virulenta sensación de la separación, de la frustración, del sufrimiento, esto es, de los devenires tensores de una dualidad kármica cuyo velo oculta la unidad plena que eres en esencia...  

Si no eres consciente de tu propio poder, de esa capacidad de Luz creativa, genuina y original autogenerada que posees en ti, el otro la utilizará para sus fines y te mantendrá subyugado, sojuzgado, claudicado y enganchado a su machaque traumático, a su abuso inveterado, a su pérfida injerencia sobre tu voluntad, percibiendo como a un salvador a quién realmente es tu perpetrador, tu vampiro, tu soplador.

Reconocer la verdad te dolerá, pero te liberará. Sal de ese trance hipnótico y descubre tu auténtica naturaleza. No sigas fingiendo más con tu disfraz de ovino dócil y sumiso a los arbitrios caprichosos del mediocre gregarismo de la oveja-reina, cuando tú sólo te bastas a ti mismo, cuando en realidad tú eres un Tigre, fiel a sí mismo, soberano, indómito, salvaje, indomesticable, el rey de la selva, instinto puro, potencia y garra. Álzate de una vez y que tu rugido retumbe por todo el universo...

 ¡Qué se entere todo el mundo que has vuelto! ¡YA ESTÁS AQUÍ!


lunes, 15 de julio de 2024

Simiente Integral.

 

Siempre es la misma historia, constantemente se abre la perversa herida que nunca-se-cierra: renegando del deseo de los otros y, en ese mismo acto, queriéndolo conquistar para sí. Reconocimiento, fama, vanidad, delirios de grandeza, omnipotencia inusitada, obsesión creadora, ser alguien. Por el contrario, anonimato, insignificancia, humildad, desinterés, anulación, pasotismo destructor, ser nadie...  Entre dos tierras, una grieta que se agranda cada vez más, una falla, un pliegue tectónico que choca, sin previo aviso, con su virulencia avasalladora, su intensidad aniquiladora, su pulsión devastadora.

¿Protagonismo o antagonismo, figurar u ocultar, sol dorado o sol negro?

Doble simiente de un mismo origen, uno hacia lo evolutivo, otro hacia lo involutivo, uno hacia lo dextrógiro, otro hacia lo levógiro, uno hacia afuera, otro hacia adentro...

Los dos y ninguno al mismo tiempo: el anverso y el reverso, el ying y el yang, la vida y la muerte, y lo que está más allá… ¡El Tao!

 

jueves, 4 de julio de 2024

Huésped Liberado.

 

Aunque notes el peso de la gravedad, la pesada carga de los arquetipos, de las manipulaciones acometidas en el astral, continúa hacia adelante en tu propósito, avanza en tu camino, no caigas en la confusión que te van a insuflar, en la bruma que provocarán en tu mente y percepción de las cosas. Cuáles neblinosos chemtrails, así esparcirán sobre ti su toxicidad emocional, delineando sus líneas de tiempo a las que insidiosamente te pretenden meter.

Constantemente te ponen palos en las ruedas, te salen obstáculos de la nada, te hacen la zancadilla para que nunca llegues a la meta de vivir tu propia vida sin los condicionamientos de la familia, de la escuela, del sistema de valores y creencias que la sociedad y la cultura en la que estás insertado te inocula, para convertirte en una mera pieza de su amorfo e insustancial engranaje.

¿Qué hacer para liberarse de esas constricciones, de esos impedimentos y dificultades que emergen a cada paso? Pues nada, solamente ignorarlos y, si acaso, aprender de ellos y que, en la medida de lo posible, los puedas utilizar como un impulso para construir tu vida, como un combustible propulsor para proseguir en tu sendero existencial y hacerte cada más autónomo, más desapegado, resistente y autárquico respecto a la opresiva dependencia a la que te abocan los enganches y adicciones compulsivas de esta simulación matricial

Es un juego que tiene lugar en tu interior: rompiendo ataduras psíquicas, cortando lazos que te atan a la identificación con tu avatar, desligándote del anclaje del personaje artificial que te han designado para ser funcional y servir de alimento a esta tridimensionalidad virtual.

sigue a lo tuyo, sin dar mucho pábulo, nada más que lo justo y necesario, a tus pensamientos y sentimientos, y menos aún, al circo social-mediático externo montado para tenerte distraído. Percibe esta experiencia de la vida como algo pasajero, de paso, anecdótico, como un antropólogo en tribu ajena, como un huésped en un hotel-manicomio cuya estadía tiene un fin y es temporal, confiando en que pronto retornarás a tu hogar. Actúa sin autoengaños de ningún tipo y ve lo real tal cuál es, entonces zafarás prácticamente de todo, y de lo que no, pues serás indiferente, te la repampinflará. Esa es la actitud.

 

Presencia Real.

  Falacia tras falacia. Cuanto más ahondas en aquello que te rodea más falsedad encuentras, y cuando te das cuenta de que esa mentira, esa t...